martes, 8 de abril de 2008

primavera

estoy aquí sentado frente a la pantalla, y sé que no seré capaz de escribir algo que calme mi sentir en estos momentos, que escribo obligado por la inercia, por el miedo a volverme a casa con la sensación de otro día con la sensación de otro día más.
Quisiera decir tantas cosas, pero no puedo. Han pasado ya los años, pero sigo teniendo tanto miedo a no encontrar nada por lo que llorar dentro de mí.
Y me siento mal, culpable por sentirme así, intentando buscar un sentir que se escapa como una sombra, culpable por no saber sentirme agradecido por todo lo bueno que me ha regalado la vida, que me habeis regalado.
Por olvidarme que cada día es una nueva aventura.
Por sentirme tan niño.
Por no saber mirar el mar.
Por sentirme tan vulnerable, a la vanidad, al rencor, a la oscuridad.
Porque sólo quiero amar.
Porque siento que me olvido de todo esto. Y no sé a quién pedir ayuda.
Porque hay tanta luz, tanta misericordia, tanta bondad detrás de cada cosa..
sqa

4 comentarios:

Vicky dijo...

me queda un dejo de melancolía y tristeza al leeré.....
en la vida siempre hay motivos, no hay que buscarlos... ningún día pasa en vano..... que mas motivos que el de ester vivos, respirando y viendo lo maravilloso que es el mundo muy a pesar de cosas desagradables que veamos o vivamos.....
Quiero agradecerte tu huella en mi bosque...
Caricias para tu alma.

sqa dijo...

gracias por tus caricias, doy gracias también porque la vida me ha mostrado muchas cosas maravillosas, por las que siento que he de luchar, supongo que a veces el corazón se pierde un poco y no encuentra el camino. Intento decirle "toma aire, pronto llegará algo bonito", pero a veces no tiene demasiada paciencia..
un abrazo fuerte

Vicky dijo...

Hoy pase a dejarte un abracito de esos con sobadita en la espalda y a desearte un buen inicio de semana.

Anónimo dijo...

El mar se mira de frente. Solo se bucea cuando se está preparado.