miércoles, 27 de diciembre de 2006

se acaba el año

Estamos a 27 de diciembre, queda muy poquito para acabar este año. Intento forzarme a escribir pero es casi imposible concederme una tregua y darme el derecho a dejarme pensar en libertad. Y sólo quiero huir y cerrar los ojos a todo lo que no sea hastío de mí mismo. Dolor interior, que fatiga el ánimo. Ojalá pudiera respetarme lo suficiente como para dejarme que pueda contar. Dónde puedo buscar? Yo sólo no puedo, yo sólo no soy capaz, no sin vuestra ayuda, no sin el recuerdo de vuestra mirada, de vuestra compañía, no sin el recuerdo que ha quedado en mí. Sólo no soy capaz. Sólo me rindo y me pierdo en cada esquina, en cada temor, en cada derrota. Sólo no puedo contar algo sin perderme en mi mundo. Es por vosotros, por tí, que puedo encontrar fuerzas para luchar y para darme permiso para ver la grandeza, para ver lo bello. Para pedir perdón y para perdonarme. Es por tí que este año puedo sonreir y llorar por lo que te echo de menos, porque contigo ví el sol de marsella, porque me abruma el sentir que conocerte fue un regalo que alguien puso ahí especialmente dedicado para mí, para cuidarme y regalarme aventura. Feliz año nuevo

No hay comentarios: